domingo, 19 de mayo de 2013

Vencidos II.

“Nire aitaren etxea defebdituko dut/ Otsoen kontra,
sikatearen kontra,lukurreiaren kontra,justiziaren kontra,/
defenditu eginen dut /nire aitaren etxea.
Galduko ditut/ aziendak, soloak,pinudiak;galduko ditut
korrituak,errenteak,interesak, baina nire aitaren etxea defendituko dut. (…)
Defenderé la casa de mi padre./Contra los lobos,contra la sequía,
contra la usura,contra la justicia,
defenderé la casa de mi padre.
Perderé los ganados, los huertos,
los pinares; perderé los intereses,
las rentas, los dividendos,
pero defenderé la casa de mi padre (…) “ (Arresti)

Me duele España, como a Unamuno, pero Castilla agoniza en mis entrañas. Ayer en Burgos, los dioses de mi tierra lloraron lágrimas de granizo y nos apoyaron con el fuego de los truenos. Contra todo y contra todos, contra la mayoría borreguil, contra los escépticos y los que no nos entienden. Contra los que nos odian o, peor aún, nos ridiculizan. Contra todo por defender el solar de nuestros antepasados, seguimos exigiendo justicia para nuestra tierra.  Codo con codo con ecologistas, en Burgos, Cuenca o Villar. Contra almacenes nucleares o fracturas hidráulicas. Contra aquellos a los que no les importan nada nuestros ríos, nuestros bosques, nuestros campos de cultivo. Los que venden nuestro subsuelo o nuestro patrimonio natural por unos millones .

En la “Caput Castellae” compartimos mesa y vino con uno de los personajes más decisivos e importantes en la historia del castellanismo moderno. Apenas le conozco personalmente, pero le vi abatido, refugiando en el sarcasmo el profundo dolor de quien ve que toda una lucha de años ha sido en vano. Cómo “traidores y criminales contra nosotros cabalgan”. Cómo propios y extraños le dan la espalda.

Que se han hecho cosas mal, que la situación del castellanismo político no es algo casual, hasta ahí llega el menos sagaz.  Quizá no contemos en nuestras filas con un líder, un caudillo guerrero, un Cid o un Juan de Padilla, un Fernán González o un Alfonso VIII que lideren nuestras mesnadas contra los que quieren que nos disolvamos como azucarillo en la marea de la Historia.

Que los partidos castellanistas se han obcecado quizá en unos mensajes y unos métodos que ya no llegan al pueblo, de acuerdo. Pero la nuestra no es una causa fácil. Quizá los que lucharon en ella durante décadas en el norte de Castilla se dejaron cegar por el reconocimiento popular, los votos, concejalías y procuradores en Cortes regionales. En el sur, mientras tanto, otros habíamos arrojado la toalla tiempo ha, dando la batalla por perdida. Para, cual ave Fénix, resurgir de las cenizas del olvido. 

Se han perdido batallas, una tras otra, desde 1521. ¿Y qué? Mientras quede un loco dispuesto a luchar, la guerra no estará perdida.

Y en tanto unos critican o insultan,  otros discuten sobre el color de la bandera o el número de provincias, la vieja guardia, como cantó  el poeta leonés , se siente vencida y agotada.

Quizá seamos los últimos defensores de esta trinchera, quizá esté todo perdido. 

Pero "aunque quedemos un puño hasta el fin combatirá (...) si la suerte nos faltara, el valor no ha de faltar.” (Luis López Álvarez)

VENCIDOS
“Por la manchega llanura /se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar.
Y ahora ociosa y abollada/ va en el rucio la armadura/,y va ocioso el caballero,
sin peto y sin espaldar,

Va cargado de amargura,que allá quedó su ventura
en la playa de Barcino, frente al mar. Va cargado de amargura,que allá encontró sepultura/ su amoroso batallar
¡Cuántas veces, Don Quijote, por esa misma llanura,
en horas de desaliento así te miro pasar!
¡Y cuántas veces te grito: Hazme un sitio en tu montura
y llévame a tu lugar; hazme un sitio en tu montura,
caballero derrotado, hazme un sitio en tu montura
que yo también voy cargado/ de amargura
y no puedo batallar!
Ponme a la grupa contigo,caballero del honor,
ponme a la grupa contigo,y llévame a ser contigo
pastor.
Por la manchega llanura/se vuelve a ver la figura
de Don Quijote pasar. Va cargado de amargura,
va, vencido, el caballero de retorno a su lugar.
 
(León Felipe)

4 comentarios:

  1. ayer viví la misma experiencias que tú y no me invade nada el derrotismo ¿es la actitud?

    yo simplemente veo que seguimos trabajando el camino. Como te dije, "Uno es el que siembra, y otro es el que siega." – (Jn 4:37)

    y a nosotros nos toca sembrar.

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  2. No es derrotismo, Javier. ¿un derrotista recorre cientos de Km, por la meseta en dos semanas, aguanta el granizo y el diluvio y pone pegatinas? Me duele lo de LM, en serio. Nadie es imprescinidble, pero no me parece positivo que el castellanismo político ande descabezado en el norte, y su referente al borde del colapso.

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    1. Y mucho menos, que la ciudadanía de CyL de la espalda al castellanismo. No, no me parece nada bueno. Así de simple. Llevo demasiada carga emocional úlñtimamente, quizá lo mejor es que -al fin- me tome un descanso.

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    2. Si nunca vinieron de frente, tampoco creo pueda decirse que ahora, esa misma gente, den la espalda. Simplemente fueron indiferentes... así mismos, más que a su tierra. Dicho esto, mi percepción es que en el sur el castellanismo es cada vez más visible. Saludos y Fuerza Castilla unida.

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