sábado, 24 de mayo de 2014

Gane quien gane, Castilla siempre pierde

Viendo el fúrgol, opio del pueblo, panem et fútbol, final de la copa de champiñones. Dos equipos castellanos. ¿qué dices, majadero,marciano? Dos equipos madrileños, dos equipos españoles, ES-PA-ÑA, ra ra ra, ya lo ha dejado rajoy bien claro. La España de 1812 ha triunfado. Ya no hay Españas, ya no hay Reynos e identidades en igualdad de derechos y condiciones. No. Hay unos inventos decimonónicos (Andalucía, Euskadi, etc etc, y cómo no, Catalonia) y luego el “restospaña” compuesto por torrentes y canis que cantan flamenco y van a los toros como señas de identidad. Y el que se oponga, es un mal español y un antipatriota (EsPPeranza dixit). 

El caso es que juegan dos equipos madrileños, y por ende, castellanos, pero Castilla, ni está ni se la espera. Banderas rojigualdas, de Ecuador, de Turquía….pero ni un mísero pendón. ¿Y qué más da? Como decía una compañera del curro temporal, ¿qué más da que Madrid ya no sea Castilla? ¿qué importa? ¿a quién le importa?  ¿Para qué queremos revertir lo que los poderosos dictaron? Todo está bien. Podréis reivindicar la vuelta a una república que duró sólo 8 años, podréis reivindicar la dictadura del proletariado que mató y esclavizó a millones. Podréis defender una España más falsa y artificial que un euro de cartón piedra. Todo será válido y respetable. Pero, ay, no pidáis la vuelta a la Castilla que fue normal desde el s. XI hasta 1983. No, no lo reivindiquéis, porque seréis insultados, ridiculizados, se reirán de vosotros, moriréis en la pobreza entre sus risas de hienas hediondas y llenas del pus de la mierda globalizadora.

Esta noche, gane el Real o el Atleti, ganará España, o Madrid, o los juegos reunidos Geyper de la caspa o del buenrrollismo multicultural. Qué más da. Castilla no existirá. Y nosotros, los últimos guerreros de la causa de nuestros abuelos, seguiremos siendo objeto de burla, mofa y escarnio.

El fúrbol pasará. Y llegarán las elecciones europeas. Y el PP, el PSOE, IU o la ramera de Babilonia que les parió sacará sus eurodiputados. Y a ninguno le importará una higa que Castilla agonize, que sus pueblos se despueblen , que Soria o Cuenca sean los geriátricos de Europa, o que entre Guadalajara y Molinos de Duero se halle el mayor desierto demográfico de Occidente. Qué más da. Somos unos nacionalistas transnochados, unos locos soñadores en el mejor de los casos, unos paletos con boina, en el peor. Qué más da que tengamos razón, qué mas da. Ya nos han etiquetado como a nacionalistas, como si fuésemos Mas u Otegi, como si Garibaldi pudiese ser Arana, o José Martí Josu Ternera. Qué mas da. Tenemos la Champions, la tele y ´la Operación Triunfo de turno.


Mañana España, Castilla, Europa, votarán. Y, gane quien gane, Castilla perderá.

Sólo una candidatura, una cooperativa utópica de mujeres y hombres bienintencionados contará entre sus filas con personas que hablarán y defenderán a Castilla o su concepto de Castilla contra todo y contra todos. Incluso contra la incomprensión de sus propios compañeros de coalición.

Tremenda ironía, que tenga que ser un eurodiputado valenciano el que defienda los intereses de los castellanos en Bruselas. A pesar de las diferencias, a pesar del trasvase, a pesar de Requena y Utiel, a pesar de los 7 cerrojos sobre la tumba del Cid, a pesar de los pijos displicentes y las pintas de Guinness a la sombra de Torre Picasso. A pesar de la ONU, la  OTAN y los pimientos de Padrón.

Castilla seguirá siendo el patito feo. “Castilla miserable, ayer dominadora, envuelta en sus andrajos…” que cantase el poeta andaluz que tanto amó a nuestra tierra.

El lunes volveremos a la realidad. A los desahucios, al paro, a la injusticia, a la emigración, a la desmotivación. A la supervivencia. El que esto escribe volverá a un trabajo temporal que le permitirá sobrevivir unos pocos meses más. Pero a Castilla, ¿quién la salvará? El oficio de castellanista está muy mal pagado, y desde luego que es desagradecido y sólo apto para los espíritus más fuertes y puros.

Castilla, a ver si despiertas de una puta vez, y yo me puedo echar una siesta .


2 comentarios:

  1. Castilla siempre pierde, esperemos que algún día cambie, pero es muy difícil...¿A quien le importa Castilla? Tiene miga, la nación más histórica de España no existe, nada más que para cuatro románticos como nosotros.

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  2. Tan tremendo y visceral como real. De lo mejor que te he leido, Vicente

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