jueves, 6 de abril de 2023

La tercera: ahora sí es abril aunque no en mi corazón

Jueves Santo, un año más. O un año menos. O el último año, solo Dios sabe. 

Hace 11 años, año arriba, año abajo, empecé a soltar mis neuras, meditaciones, ideas y memorias desde este diario de a bordo de navegante . De holandés errante por un océano de sufrimiento. Pero ya ni  para escribir bobadas sirve ese niño que prometía. Vanitas vanitatum et omnia vanitas. (1)

Dudaba sobre cuál sería la tercera publicación de este año, que preví para marzo. Ya es crónica la sequía de este blog. O más que sequía, procrastinación, ya que ideas siempre ha habido en esta loca cabeza.

Ideas que oscilaban entre mi defensa del mal llamado “hombre blandengue” y mi reivindicación de otras formas de entender la masculinidad hasta la reflexión sobre (precisamente)los machos alfa, o beta  que inspiraron y marcaron mi manera de afrontar la vida en una u otra manera (2) 

Pero hoy no es ese día. Hoy es Jueves Santo, el día en que el Dios hecho hombre instituyó la Eucaristía, el día del Amor fraterno, el día en que la Historia de la Humanidad empezó a cambiar.

Un día en el que tendría que haber estado escribiendo sobre la conversión de las personas, mi redención personal y el Amor como única solución a los males de este planeta. 

Pero hoy no es ese día. Miento muy mal : es uno de mis defectos o virtudes. 

Sé, si el Criador la mantiene en esta vida, que el águila volverá a alzar el vuelo . Algún día. Aunque esta águila no sea más que un pobre gorrión con ínfulas(3)  . 

Hoy ese alma de gorrión está rota . Y no solo no vuela , sino que repta sobre las losas recalentadas por este sol antinatural , fruto de la geo-ingeniería de los hijos de Satán.

Alma rota, atravesada por tres espadas: la de la muerte, la de la incomprensión y la  de la duda.

Solo sé que no sé nada, pero sí que sé que si tiene algún sentido este dolor que me despedaza el corazón será para ofrecérselo al que sufrió la incomprensión, la burla y el odio de sus propios hijos. 

Decía Cesare Pavese que el sufrimiento es inútil. Yo prefiero pensar, con las Santas y Santos , que el sufrimiento me acerca a ÉL 

Ojalá.

Hoy, 8 días después de la muerte del ser más puro , dulce y cariñoso que he conocido en décadas , mi corazón está más muerto que vivo. 

Pero sé que si Dios es Amor como me enseñaron y siempre creí, todas estas lágrimas tendrán algún sentido. Si no fuese así nada de este tendria sentido y no merecería la pena seguir en este absurdo existencial sometido a la angustia vital y las contingencias. Pero yo no pienso asi, no. No soy un cenizo fumador de pipa ni me veo departiendo con Simone de Beauvoir y Camus en un café parisien

Quiero seguir creyendo en esa fuerza trascendente y sobrenatural que dota de significado a los días de nuestra vida. Solo así podre sobrellevar y asumir, aunque no lo entienda, la muerte de mi pequeño ángel sin alas.

Vuela alto, Mila. Te queremos.




(1) Las entradas de este blog tuvieron cierta continuidad, sin llegar a una precisa periodicidad. Causas diversas, exógenas y sobre todo endógenas, en las que no voy a entrar  llevaron a que las publicaciones fuesen cada vez menores y más espaciadas en el tiempo. Y así, de las varias publicaciones al mes  de los primeros años se fue pasando a entradas mensuales, trimestrales...sin más criterio que mi ánimo y tiempo libres (cada vez más escasos) circunstancias técnico-informáticas (aunque esto último es una vil excusa, “querer es poder” y ya hace meses que me prestaron un dispositivo informático que no tardaba en arrancar horas y que no se cuelga cada poco tiempo. Mi perfeccionismo paralizante tampoco ayudó. Quería publicar poco y bueno pero, al igual que con mis interminables novela y poemario, lo perfecto resultó ser el peor enemigo de lo bueno. Y al final ni bueno, ni malo, ni nada. 

(2) y que, salvo mi padre , mi hermano y poco más resultaron ser como el “Bell Boy” de la película (y el disco ) “Quadrophenia”. El dandy, el líder político, el héroe de internet, el presbítero carismático, el guía de la revolución nacional castellana. Todos, sin pretenderlo ellos mismos, una farsa. Como yo mismo. 

(3) otra entrada prevista de este mi blog, sobre gorriones, palomas y urracas y que también voy posponiendo 







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